El hipódromo inglés Royal Ascot de Gran Bretaña ,además de ser uno de los puntos de encuentro de carreras de élite más importante en el mundo, esta semana el Royal Ascot es la joya de la corona de la temporada de verano inglesa .El Royal Ascot es uno de los permanentes favoritos de la reina Isabel II
Ascot ocupa un lugar destacado en la cultura popular británica: no es coincidencia que el personaje de Audrey Hepburn en la película My Fair Lady se diera a conocer como miembro pagado de las clase alta en el Royal Ascot.
La mística yace en su larga asociación con la familia real británica. Ubicado en el campo inglés a sólo seis kilómetros del castillo de Windsor, en tierras que siguen siendo propiedad del Crown Estate, las sucesivas generaciones de apadrinamiento real han dotado a Ascot junto con muchas de sus tradiciones únicas. Una de las cuales es la llegada de la reina cada día en un carruaje tirado por caballos.
“A veces baja y ve los caballos en la pista de desfile, algunos días ella presenta los premios, y si tiene un corredor bajar al desfile previo para ver cómo lo ensillan”.
La reina Isabel tiene un interés bien documentado en todos las asuntos ecuestres, y ha estado asistiendo a Royal Ascot desde antes de que su reinado comenzara en 1952.
El espectáculo de Royal Ascot, sin embargo, no esta completo es sin la moda; en particular, los sombreros.
El uso de sombreros es otra tradición que remonta a la familia real: no se consideraba respetuoso tener la cabeza descubierta en la presencia del monarca.
La Reina es a menudo el centro de una especulación febril en cuanto al color y estilo de sombrero que usará un día determinado.
En el Día de las Damas, los sombreros a menudo van desde lo exquisito hasta lo excéntrico. Como una de las pocas ocasiones sociales restantes que requieren a las damas usar sombreros, los amantes de la moda en los últimos años han elevado las expectativas con diseños escultóricos que son obras de arte por derecho propio.
A medida que la afamada temporada celebra la semana más ocupada de su historia de 300 años, Barnett sabe que los ojos del mundo estarán puestos en Ascot del 14 al 18 de junio.
“Es este espectáculo excepcional: carrozas impresionantes, colores maravillosos, los mejores caballos pura sangre corriendo, una oportunidad para que las personas se vistan con sombrero de copa y frac, y sombreros preciosos.
Pues bien, ya teníamos los caballos, y veníamos preparados para la ocasión: los niños con sombrero y corbata, y las niñas, con pamelas y bolsos a juego. Cuando nos dirigimos a las pistas del cole grande para iniciar nuestras carreras de caballo, nos llevamos una grata sorpresa, la reina Isabel , apareció acompañada del Beefeater, el guardián de la Torre de Londres (en la que se encuentran las joyas de la Corona perteneciente a la familia real británica).Ellos no querían perderse las carreras de Ascot, y venían preparados para la ocasión.
Todos y todas participaron en las carreras, y al final, recibieron una medalla, por lo bien que lo hicieron.
Pero la fiesta no terminó aquí. A continuación celebramos el 88 cumpleaños de la reina, que apagó las velas en presencia de todos ,y quien hizo los honores de partir y repartir la tarta, que degustaron la mayoría de los niños y niñas. Y para terminar, con ayuda de las familias que participaron en la actividad, se sirvió el té con pastas , aunque en esta ocasión no fue a las 5 en punto ,como acostumbran los ingleses.
Hemos disfrutado muchísimo: niños, niñas, maestra y familiares. Muchas gracias a todos los familiares por vuestra colaboración.